El ejercicio periodístico en el Ecuador
La entrevista fue realizada a Sandra Cárdenas, quien se desempeña como periodista en El Diario, de Medios Ediasa.
Complicado. En este tiempo ejercer
el periodismo es una verdadera responsabilidad, se debe tener sumo cuidado con todas
las publicaciones para evitar que se presenten problemas para el medio y el
periodista.
Según
su opinión, ¿la libertad de prensa está amenazada en nuestro país?
En el país se tenía un mal concepto
de libertad de prensa, y muchos llamados "periodistas" hablaban sin
tener bases, entonces creo que es correcto que eso se norme. Sin embargo si
considero que está amenazada la libertad de prensa, ya no se puede emitir un
comentario sin el temor de que puedan haber represalias o publicar algún texto
o foto que pueda ser tergiversado.
¿Cree
que el actual Gobierno ha adoptado como política el enfrentamiento con la
prensa?
Sí. Se ha vuelto el pan nuestro de cada día. Discusiones, insultos
gritos y "show" entre presentadores y funcionarios del estado están a
la vuelta de la esquina. Creo que en ambas partes hay errores que deben ser
mejorados.
¿A
qué cree que se debe la falta de periodistas titulados en el país?
A la comodidad y la poca exigencia
de los medios en profesionales. Si desde un principio se hubiesen incorporado a
los medios de comunicación profesionales, las cosas no estarían como ahora, en
que la mayoría de empíricos se creen dueños absolutos de la verdad y muchas
veces actúan sin ética profesional.
¿Cree
que hay preocupación en los periodistas por la existencia de restricciones, que
se generaron a raíz de la aprobación de una nueva ley de comunicación?
Absolutamente. Como comunicadora,
que actualmente ejerzo en un medio de comunicación, la preocupación está
latente. No tanto por las restricciones si no por lo subjetiva que es la ley y
muchas veces no sabemos a qué nos estamos enfrentando.
¿Hay
esperanza de una mejoría en cuanto a la relación entre el Gobierno y los
periodistas de nuestro país?
Yo creo que cuando ambas partes
decidan poner de su parte y ejercer su trabajo; no con el fin de ver quien es
más que quien, sino con el objetivo de dar lo mejor a la comunidad, si habrá
una mejoría. Cuando se dejen los insultos y las faltas de respeto absurdas.
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